2 de noviembre.


 

Te amo, te extraño, me frustro y te invento. 

Te invento en el patio y en las flores carmín, te invento porque ya no brillan desde que tuviste que partir; te invento porque los nogales y frutas del pueblo ya no me hacen igual de feliz; y escuchar a Pedro Infante no es lo mismo sin ti. 


Te lloro, me lloro, le lloro a tu ausencia que me aterra y le lloro a tu recuerdo porque es lo único de ti que me queda. 


Le lloro al vacío que me dejaste y lloro porque no te encuentro en ninguna parte. 


Lloro porque pensar en ti hace que me duela el corazón y pensar en olvidarte me destroza, corazón. 


Repaso los días del año, ésta vez sola; sin tu risa, ni tus besos, ni tus novelas en la tele a todas horas. 


No había puesto un altar de muertos en otros años, pero ahora tu foto está ahí y yo aquí te estaré esperando. 

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